Cuando un niño presenta un cuadro diarreico, son muchos los mitos que están alrededor del cuidado que debe darse, la importancia y las medidas a tomar, por esta razón, despejamos algunas dudas o ideas erróneas.
Mito:
No alimento de forma normal a mi hijo hasta que le pare la diarrea. Es mejor tener una dieta estricta para no empeorar la diarrea.
Realidad:
NO, la alimentación debe continuarse de forma regular. La diarrea no debe considerarse una contraindicación para continuar la alimentación regular de los niños. La alimentación se continúa desde el inicio de la diarrea, los niños alimentados con lactancia materna deben continuar lactando de forma habitual. En los niños que se deshidratan, la alimentación debe iniciarse inmediatamente después de terminar el esquema de rehidratación.
La alimentación temprana tiene dos beneficios:
- Reduce la duración de la diarrea, ya que permite una recuperación más rápida de las células intestinales.
- Mejora la ganancia de nutrientes, evitando que el niño entre al círculo vicioso de diarrea/desnutrición.
No se recomiendan la alimentación del niño durante el episodio de diarrea con dietas altamente restrictivas (pan, arroz, manzana) o a base exclusiva de alimentos altamente astringentes (arroz, pollo, zanahoria, pera, manzana).
Durante la alimentación, no se recomienda el consumo de alimentos ricos en azúcares simples como los jugos de frutas envasados, las bebidas para deportistas ni las aguas gaseosas.
Mito:
En los lactantes hay que dejar de dar pecho o cambiar la fórmula.
Realidad:
No. Los niños alimentados con leche materna deben continuarla de forma habitual. Se debe resaltar que la alimentación con leche materna hasta los seis meses de edad reduce la prevalencia de diarrea (los niños padecen de menos episodios de diarrea comparado con aquellos alimentados con fórmula exclusiva).
Mito:
Si uso antibiótico, mi hijo se cura más rápido.
Realidad:
No. La utilización de antibióticos de forma rutinaria en los episodios de diarrea no es necesaria, ya que la mayoría de los cuadros pudieran no necesitarlos, en Guatemala según el estudio de Colombia, el uso inadecuado de antibióticos en los episodios de diarrea es de un 32.7%.
Mito:
Hay que rehidratar al niño y se puede hacer con cualquier tipo de bebida.
Realidad:
Están indicadas únicamente las sales de rehidratación oral. El dar bebidas como jugos de frutas o bebidas deportivas provoca una mayor duración de la diarrea, mayor volumen de las evacuaciones. Es común que las madres den agua gaseosa o jugos, pero estos tienen alto contenido de azúcar y empeoran la diarrea provocando mayor deshidratación. Las sales de rehidratación oral con menor contenido de sodio (75 o 60) son las recomendadas, ya que se asocian significativamente con una menor tasa de gasto fecal, menor duración de la diarrea y menor frecuencia de vómitos. La OMS lo considera la primera línea de tratamiento.