La salud bucal es uno de los pilares principales de la higiene diaria, ya que promueve la limpieza y buen funcionamiento de los dientes, encía y lengua, motores de la buena alimentación.
La importancia de mantener una buena higiene radica también en que, si se cuenta con buena dentadura, la alimentación será mejor, no existe nada más molesto que un dolor de muelas o las terribles caries.
Esta rama de la medicina es una de las más temidas por muchos, y es que el terror de tener que someterse al dolor, incomodidad y que, a su vez, no podamos verlo aumenta el nerviosismo y la ansiedad, pero para suerte de todos, la prevención es la clave para evitar llegar a un procedimiento mayor.
La prevención es la clave
Todos sabemos las premisas básicas de la higiene bucal, lavarse los dientes tres veces al día o después de comer, utilizar constantemente hilo dental, aplicarse flúor y enjuague son algunos de los más conocidos, pero la importancia de mantener una boca sana es necesario para mejorar nuestro estilo de vida, por esta razón te dejamos algunas recomendaciones que quizás conozcas pero que necesitan siempre ser recordadas:
Uso de productos limpios y en buen estado
Muchas veces no recordamos cuándo comenzamos a utilizar un cepillo nuevo, no verificamos que tenga residuos de pasta dental, comida o que se encuentre en mal estado. Es necesario siempre verificar el estado del cepillo antes de utilizarlo, si ves que está desgastado o decolorado, cámbialo, no esperes a los tres meses reglamentarios. Esto también aplica para la pasta dental, verifica el estado de la misma, si no tiene residuos de agua o jabón, en especial la de los niños ya que en ocasiones dejan de lado o la tiran.
Además de esto, el hilo dental también tiene que ser seco, sin grumos o fuera de la fecha de vencimiento. Los enjuagues también tienen que contar con control de calidad.
Pedir consejos y seguimiento
Siempre busca ayuda de tu odontólogo, si te funciona un producto, si necesitas mayor cantidad de cuidado, si deseas pasar a productos naturales o simplemente, para evitar caries o molestias.