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Snacks Saludables

Los snacks, también llamados bocadillos, son los alimentos ingeridos entre comidas importantes o son servidos de preámbulo en un tiempo no muy lejano del platillo principal con la finalidad de calmar el apetito durante un tiempo y en otros casos, consumidos por convivencia o ansiedad.

Por lo general, estos snacks son sinónimo de grandes cantidades en grasa, azúcares y sodio pero también existen los snacks saludables.

No se puede generalizar cuál es el snack más saludable ya que tenemos diferentes rutinas, estilos de vida laboral, peso, entre otros, pero debemos entender que nuestro metabolismo funciona a tiempo real por lo que no es lo mismo un snack para alguien que tiene un desgaste físico constante por lo que necesitará comer algo que le libere energía de manera gradual o una persona que pasa sentada en un trabajo o estudio por lo que hay que evitar consumir calorías extra.

Sería útil utilizar los snacks para ayudarnos a evitar la ansiedad y a no comer de más durante los tiempos principales de comida.

  1. Haz un horario: – Si dejas pasar mucho tiempo sin ingerir alimento, el metabolismo se hace más lento por lo tanto hay un gasto calórico inferior produciéndose, un descenso en la producción de insulina, favoreciendo a incrementar depósitos de grasa (trata de no dejar pasar más de tres horas después de las comidas para tomar un snack). 
  2. Calcula la porción: – Debe poseer entre 100 a 200 calorías para mantener tu peso, busca fuentes saludables ricas en fibra.
  3. Raciona y separa tu porción: – No basta con saber cuánto debes comer, te aconsejo que tomes la porción calculada para no caer en el juego de comer más de la cuenta.
  4. Combinación saludable: – No es suficiente ver el conteo de calorías, debes asegurarte de que provengan de una fuente saludable como frutas, vegetales, granos enteros, nueces o algún alimento bajo en grasa.
  5. Aléjate de frituras y golosinas: – No tengas en casa comida chatarra, porque entre más a la vista y alcance están es más fácil llegar a consumirlas.
  6. Engaña a tu mente: – No tomes snacks fraccionados, trata de servir porciones más enteras para dar la impresión de que estás consumiendo una cantidad mayor y si necesitas plato utiliza uno que sea pequeño para que la ración servida se vea mayor.
  7. Prepáralos en casa: – Trata de elaborar tus snacks en casa para que puedas controlar las cantidades y procedencia de cada ingrediente, además, será amigable a tu bolsillo.

El artículo fue escrito por Licda. Jeanette Corado, para mayor información y contacto:

Especialidad: Nutricionista.

Licda. Jeanette Corado

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